sábado, 29 de junio de 2013

crear



El temor a comprender ha de hacerme fuerte. El silencio que rompe Patti simplemente no existió.  Gloria. Sabe a gloria la soledad frente al mundo. Señuelos dejo por todas partes y luego retornan a mí en forma de dolor. El traje del emperador me viene grande. Y Patti canta. Ilusiones quebradas de las que ha de nacer el siguiente paso. Defiende tus derechos. Hasta los señuelos tienen pretextos para no tirarse al agua. Si pensáis que me complico, os diré que la sensación del no fondo envenena mi alma. Soy pasto de una naturaleza severa. Hoy tengo que vivir, hoy toca. Un trasfondo que lucha por salir a la superficie indica cual es el camino. Gloria. Me llevó tiempo entender  que los sueños se componen de imágenes que tenemos de nosotros mismos. La noche blasfema, escupe y siegue hablando sola, mientras apura una cerveza.  Mi calle está empobreciendo, ¿y la tuya? No camino solo mas me corroe la soledad.  Atentar contra la rabieta de tu interior, al sentirse no escuchado. Voy a crear. 


viernes, 28 de junio de 2013

El vértigo y la automática.



Autómata perdido buscando regreso al hogar. Las circunstancias no me eran favorables. Cría Cuervos. La necedad de tu antojo. Desprovisto de la soledad me veo en la intemperie. La noche se oculta tras tus ojos, ¿a dónde vamos? La tristeza suplicaba arte mientras su amante buscaba una salida fuera de sí. Que ruin y mezquina es mi vida. Una vida a medias con alguien, es lo único que les quedaba en La Tierra Viajes. La verdad es que todo era bastante confuso, cuando caso podía tocarte. Voy a ver la película Cría Cuervos de Saura y producida por el difunto Querejeta.  Os dejo el tráiler si lo encuentro.




Nanit!!! Felicitats Pere.

Los gritos de Wendy.



Un grito rompió la noche, y después, un silencio profundo, proveniente de todas partes, se deslizó hacia mi interior quebrando el corazón. ”Los tiempos de cambio siempre son duros.” Dijo, mi alma, a medida que hacía trapos, dando tirones a su disfraz de luto. El pretexto se llevó todos los méritos de la propuesta, y así un día crecí, Wendy. Las palabras iban encajando en mi cabeza, llenando mi rostro de lágrimas, perdido en la inocencia que silenció las advertencias, lágrimas de alegría surcaban mi rostro.

Partió rumbo a ninguna parte, intentando recordar su sueño, trepando por el reloj que corría en el sentido inverso de la necesidad. Dio un paso y tras este, otro, a medida que desaceleraba un envejecimiento poco soluble para una imaginación tan suicida. El tenedor  mostraba los caminos a seguir y desprovisto de la coraza que lo mantuvo aislado durante tanto tiempo, eligió el camino del asombro. Sin esperar, pero cargado de esperanza, se dirigió hacia la sorpresa final. Recordó en el preciso instante en que logró olvidar. De un bandazo de sus alas hizo volar las migas que había dejado tras de sí, y sonrió. La sombra que lo cegaba murió bajo la luz de su recién estrenada seguridad.